13 de febrero de 2025
Seis formas en que el alcohol puede afectar el sistema digestivo

Ante la presencia de síntomas intestinales, reflujo o molestias, los especialistas recomiendan reducir el consumo
Beber Las bebidas alcohólicas ácidas (como el vino y la sidra) y las carbonatadas (como la cerveza y algunos cócteles) pueden empeorar los síntomas del reflujo, afirmó Cynthia Hsu, gastroenteróloga y profesora adjunta de medicina de la Universidad de California en San Diego.
Incluso una noche de consumo excesivo de alcohol puede hacer que se inflame la mucosa gástrica, provocando síntomas como náusea, malestar o dolor estomacal por uno o dos días, aseguró Shane.El alcohol también puede aumentar el riesgo de hemorragias en el tracto digestivo. En un estudio de 2016 de casi 50.000 hombres estadounidenses, los hombres que consumían una o dos copas al día tuvieron un 67 por ciento más de probabilidades que los que no bebían de desarrollar hemorragias gastrointestinales graves, principalmente por úlceras en el estómago y en la primera parte del intestino delgado.Cuando consumes alcohol, el estómago absorbe una pequeña cantidad y tus intestinos absorben o descomponen el resto. “Si bebes demasiado de golpe, terminarás con más alcohol de lo habitual mezclado con tu flora intestinal,” explicó Hsu.El alcohol arrastra agua al intestino, lo que puede provocar deposiciones blandas, señaló Shane.
Beber en exceso también puede causar o exacerbar la intolerancia a la lactosa, pues el alcohol puede dañar las células que fabrican la enzima que descompone los azúcares naturales de la leche, comentó Ali Keshavarzian, gastroenterólogo y profesor de medicina interna de la Universidad Rush de Chicago
Las investigaciones indican que incluso un único episodio de consumo excesivo de alcohol puede hacer que la mucosa intestinal sea más permeable, que “gotee”, afirmó Szabo. Esto puede permitir que las toxinas del intestino se filtren al torrente sanguíneo, lo que causa inflamación en todo el cuerpo, señaló.En enero, Vivek Murthy, el anterior cirujano general de Estados Unidos, advirtió que beber alcohol podía elevar el riesgo de padecer al menos siete tipos de cáncer, incluidos los de boca, garganta, esófago, hígado, colon y recto.
Aun los niveles bajos de consumo de alcohol, como una bebida al día, pueden contribuir al riesgo de cáncer de varias maneras, señaló Keshavarzian, ya que pueden promover procesos nocivos en el organismo que conducen a la inflamación y pueden dañar tu ADN, células y proteínas.