30 de abril de 2025
Científicos de Israel diseñaron un dispositivo innovador que monitorea la salud a distancia

Los investigadores del Instituto Weizmann de Ciencias desarrollaron un sensor con tecnología de radar que rastrea los signos vitales, como frecuencia cardíaca y respiratoria, de manera inalámbrica
Uno de los problemas que plantearon los médicos durante esa sesión fue el riesgo de propagación de la infección por contacto físico durante el seguimiento de pacientes hospitalizados. “Abordar este problema encajaba perfectamente con mis intereses de investigación”, afirma Eldar.
En ese momento, Eldar acababa de incorporarse al Departamento de Informática y Matemáticas Aplicadas del Instituto Weizmann de Ciencias, donde fundó un laboratorio que desarrolla tecnologías innovadoras para el procesamiento de señales e información en diversos campos, incluyendo la medicina. Decidió, junto con su equipo, desarrollar una tecnología completamente nueva para el control remoto de la salud de las personas mediante radar.
Eldar ha trabajado con radares desde el inicio de su carrera científica, por ejemplo, en relación con vehículos autónomos y aplicaciones de defensa. Explica: “Los dispositivos de radar son pequeños, económicos y prácticos, y emiten ondas seguras para los humanos: se han utilizado, por ejemplo, para contar el número de personas en una habitación o para asegurarse de que ningún bebé se quede atrás en un coche. Así que pensé: ¿por qué no aplicar el radar para monitorizar a los pacientes a distancia?“.
Cinco años después, los investigadores del Weizmann presentan BRAHMS, el Sistema de Monitoreo de Salud Bio-Radar, diseñado para monitorear continuamente los signos vitales de una persona a distancia.BRAHMS funciona rastreando los movimientos sutiles del pecho e interpretándolos mediante un sofisticado algoritmo desarrollado por el equipo de Eldar. El equipo ya ha demostrado que su sistema puede monitorizar de forma fiable a varias personas a la vez, incluso en entornos ruidosos y concurridos.
Identifica a todas las personas en la habitación, mide sus constantes vitales sin contacto y envía las mediciones a un monitor. Este monitor puede alertar al personal médico si detecta un cambio que pueda indicar un problema.Eldar y sus colegas también prevén el uso de unidades BRAHMS para la monitorización de niños hospitalizados, quienes suelen ser inquietos y les desagrada estar conectados a dispositivos. Las unidades sin contacto no solo reducirían el riesgo de propagación de infecciones, sino que también eliminarían la incomodidad del paciente y la molestia de los cables enredados o desenganchados.
Se estima que alrededor del 40 % de los pacientes de unidades de cuidados intensivos experimentan irritación cutánea, cables sueltos u otras complicaciones relacionadas con los dispositivos de monitorización a pie de cama, lo que motiva aún más la transición hacia la detección por radar sin contacto.“Combinamos ingeniería, matemáticas y física, hasta el nivel de ecuaciones físicas que describen el movimiento ondulatorio y la propagación de la información, con el objetivo de resolver un problema clínico real, y eso fue lo que hizo posible el desarrollo”, afirma.
El equipo de desarrollo incluyó personas de diversos orígenes: el estudiante de doctorado Yonathan Eder, quien dirigió la investigación, la experta en desarrollo de algoritmos Luda Nisnevich, los ingenieros Shlomi Savariego y Moshe Namer, y el gerente clínico Dr. Adi Wegerhoff.