15 de noviembre de 2024
La historia de Davide Morana, el joven deportista que perdió todas sus extremidades por una meningitis

Un diagnóstico fallido desencadenó una serie de eventos que transformaron la vida de este atleta italiano, llevándolo a enfrentar la pérdida de ambos brazos y piernas
Tras más de 80 días hospitalizado y casi doce operaciones, ecibió el alta médica y comenzó una nueva etapa. Aunque el proceso de adaptación fue difícil, nunca perdió el buen ánimo ni las ganas de seguir adelante. Cecilia Cano, su pareja, fue un pilar fundamental en este periodo. “Yo siempre creí en él”, expresó a Vanity Fair. Cecilia decidió no solo acompañarlo, sino también documentar cada etapa de esta experiencia, que luego publicaría en su libro Arriba la vida.
Pese a la gravedad de su condición, Davide sorprendió a los médicos con su fortaleza mental. Rechazó tomar antidepresivos y sostuvo que las pruebas de su vida lo habían preparado para este desafío. “Salí de casa muy joven y tuve que enfrentarme a la realidad de la vida a temprana edad”, explica, y añade que nunca ha dejado de ver lo ocurrido como una prueba más que le tocó superar.“No me gusta ser visto como un ejemplo de superación”, ha dicho a The Sun, “creo que todos superamos dificultades diarias, y solo porque lo mío es visible, llama más la atención. Pero al final, todos debemos aprender a adaptarnos”.
La vida de Davide también representa una denuncia. El joven deportista se ha convertido en una voz crítica contra las dificultades que enfrentan las personas amputadas en España, donde el costo de las prótesis es extremadamente elevado y el apoyo estatal insuficiente. “Una mano biónica cuesta casi 50.000 euros”, explicó en su campaña de crowdfunding, que logró recaudar fondos para financiar sus primeras prótesis. Sin embargo, el mantenimiento anual sigue siendo costoso, y las prótesis deportivas no están incluidas en el catálogo de financiamiento español.Davide ha encontrado en las redes sociales un espacio donde comparte su día a día y su visión positiva, inspirando a miles de personas alrededor del mundo. Sus videos muestran cómo ha aprendido a manejarse de forma autónoma con prótesis, y cómo cada pequeña victoria diaria se convierte en un símbolo de perseverancia. Hoy, desde su pequeña “ventana al mundo”, Davide recuerda que la vida puede cambiar en cualquier momento, pero que es posible enfrentarse a la adversidad con optimismo y determinación.