30 de mayo de 2025
Quién era el comerciante que murió en la ruta 2 tras ser embestido por un ciudadano chino que manejaba borracho

Ariel Pirollo, de 33 años, falleció en la madrugada del domingo, cuando se dirigía hacia la localidad de El Pato para buscar a su hijo, que estaba de sus suegros. Fernando, uno de sus socios y mejores amigos, lo recuerda en diálogo con Infobae como un hombre “extrovertido y molesto”, que siempre estaba “de buen humor”
El gran aporte de Ariel a la causa de los brigadistas fue reconocido por los propios Bomberos Voluntarios de Florencio Varela, que tras su fallecimiento compartieron un conmovedor posteo en sus redes sociales. “Deseamos un eterno descanso y nuestras condolencias a toda la familia y amigos del Sr. Ariel Pirollo, quien siempre junto a sus socios ha colaborado activamente con nuestra institución con la donación de insumos del negocio “Barto Limpieza” de la localidad de Ingeniero Allan. Un fuerte abrazo para sus socios, familiares y amigos >Además de su vocación solidaria, a Ariel lo apasionaba el fútbol. Era hincha del club Boca Juniors y solía jugar torneos amateurs junto a sus amigos. Y también se destacaba por su perfil artístico. “A Ari le gustaba cantar, quería ser cantante. Tenía una banda que se llamaba La Tóxica. Tocaba la guitarra y el bajo >De perfil extrovertido, Ariel era apodado “El Enano”, debido a sus constantes chistes y “maldades” con las que divertía a amigos y familiares. “Siempre estaba de buen humor. Le decíamos El Enano porque era maldito, bolacero, siempre te salía con algún chiste”, recordó con evidente emoción uno de sus socios, con quien se conocían desde la escuela primaria y se recibieron de técnicos electromecánicos en el Politécnico de Berazategui.
Si bien en un primer momento trascendió que Ariel y sus acompañantes viajaban rumbo a Mar del Plata, Fernando desmintió esa versión. Durante la charla con este medio, contó que su amigo se dirigía a la casa de sus suegros, en la localidad de El Pato, para recoger a su pequeño hijo. Pero la tragedia tocó la puerta en el camino, y Ariel fue víctima de la imprudencia de un conductor que no solo conducía en contramano por una autopista, sino que además lo hacía en estado de ebriedad.