12 de agosto de 2025
Lance Armstrong habla de su caída a los infiernos: de perder 100 millones de dólares a las inversiones que cambiaron su vida

El exdeportista ha hablado sobre su etapa como ciclista y los peores momentos de su trayectoria
En el plano personal, Armstrong ha reflexionado sobre la importancia de la resiliencia y la capacidad de reinventarse tras la adversidad. “La única opinión que me importa es la de quienes estuvieron en la carrera”, aseguró, subrayando que el juicio público ha dejado de ser su principal preocupación. Reconoció que la llamada “cultura de la cancelación” lo afectó profundamente, aunque considera que el paso del tiempo y un cambio en la percepción social le han permitido recuperar visibilidad.
Actualmente, Armstrong combina su trabajo en Next Ventures con hábitos que conserva desde su época de atleta. “El ejercicio es mi iglesia; necesito moverme para estar bien mentalmente”, explicó. Disfruta de salidas en bicicleta en solitario, madruga para leer y reflexionar, y valora el tiempo en familia junto a su esposa e hijos, quienes, según relata, lo ven como “un payaso” en el sentido más cariñoso. Al compartir una analogía sobre el Tour de Francia, Armstrong comparó la experiencia de caer en la carrera con “saltar de un coche en movimiento a gran velocidad”, ilustrando la dureza de los reveses sufridos.