7 de agosto de 2025
Habló el hermano del joven enterrado al lado de la casa donde vivió Cerati: “Necesitamos saber por qué”

Javier Fernández, menor que Diego, dijo que los primeros en considerar que se podría tratar de su pariente desaparecido fueron su cuñado y su sobrino. Y pide Justicia. Lo buscaban desde 1984
“Primero fue Felipe, mi cuñado, y Pedro, que es su hijo y mi sobrino, quienes empezaron con esto. Después yo me puse al tanto de todo. Sabía de la noticia, pero en ningún momento se me cruzó que podía ser el cuerpo de Diego. Cuando me contó Pedro, no lo podía creer. Desde ese día duermo poco, lloro mucho, me río”, narró Javier, quien tenía solo 10 años cuando su hermano desapareció.
En sus declaraciones, Javier remarcó que en aquel momento su padre y su madre, junto con la Policía, interrogaron a amigos del colegio y del club Excursionistas, donde Diego jugaba al fútbol. “Quizás sí se supo a qué casa iba, pero pasaron 41 años. Mi madre está fuerte, pero a veces no recuerda”, explicó.
Durante años, la familia convivió con todo tipo de conjeturas. “Como la época era recién saliendo de la dictadura, pensé que lo chuparon. Que estaba en la agenda o era amigo de alguien y lo secuestraron”, expresó.“Mi viejo hizo todo con mi vieja, mi hermana, mi primo, familias y amigos del barrio. Nos conocen todos. Estamos acá todavía”, contó sobre la ayuda que recibieron durante todos estos años de búsqueda.La casa donde fueron hallados los restos está ubicada a apenas cinco cuadras de donde lo vieron por última vez, detalló Javier, y a unas 15 o 20 cuadras de la vivienda familiar. “Yo sé lo que me dijo la fiscalía: en ese lugar siempre estuvo esa casa”, indicó.
“Necesito justicia por mi hermano, por mi papá que se murió buscándolo. Por mi mamá, mi hermana. Tenía 16 años Diego, ¿qué hizo? No me entra en la cabeza”, agregó.
“Gracias a las redes y a ustedes, los periodistas, si no fuera por eso yo me muero, mi mamá se muere, y es sin encontrar a mi hermano”, dijo Javier, conmovido.El trabajo del prestigioso Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) fue clave en la identificación de los restos hallados en la avenida Congreso. El procedimiento comenzó con la recuperación parcial de huesos y de la evidencia asociada, seguida de un análisis arqueológico del contexto de inhumación.En paralelo, se recogieron muestras de ADN de familiares de personas desaparecidas, que luego fueron comparadas con el perfil genético obtenido de los restos.