6 de agosto de 2025
Dolor en el fútbol alemán: a los 67 años murió Frank Mill, campeón del mundo en Italia 90 tras vencer a Argentina en la final

El ex futbolista había sufrido en mayo un ataque al corazón y un derrame cerebral que les habían dejado secuelas
De acuerdo con la prensa alemana, los servicios de emergencia lograron reanimarlo luego de que su corazón se detuviera durante varios minutos. Posteriormente fue trasladado a un hospital de Essen, en donde quedó internado para seguir con el tratamiento.
Durante sus ocho años en el Borussia Dortmund, Mill fue pieza clave en la conquista de la Copa de Alemania en 1989 y participó en gestas relevantes como el subcampeonato de la Bundesliga en 1992 y la final de la Copa de la UEFA en 1993. En ese periodo, Mill se destacó tanto por sus goles como por su influencia dentro y fuera del campo. El director ejecutivo del Dortmund, Hans-Joachim Watzke, expresó: “Nuestros pensamientos están con la familia y seres queridos de Frank Mill. El Borussia Dortmund lamenta la pérdida de un gran jugador de los años 80 y 90”. Watzke recordó: “Frankie era un jugador astuto en el campo y un conversador excepcional fuera de él. Cuando se unió a nosotros en 1986, las cosas empezaron a mejorar. Desempeñó un papel fundamental en la conquista de la DFB-Pokal en 1989, el subcampeonato de liga en 1992 y la final de la Copa de la UEFA en 1993”.
Frank Mill, nacido el 23 de julio de 1958, deja tres hijos: Vanessa, Kevin y Max. Su carrera, marcada por la regularidad, el compromiso y una destacada capacidad para sobreponerse a la adversidad, lo ha convertido en una figura respetada por colegas, aficionados y clubes. Sus antiguos equipos y la Federación Alemana de Fútbol lo despidieron con mensajes de duelo y reconocimiento a su legado en el deporte alemán.El presidente del club, Dr. Reinhold Lunow, señaló: “Fue uno de mis héroes y un invitado muy bienvenido en nuestro estadio en los últimos años. Sin Frank Mill, el Borussia Dortmund no habría ganado la copa en 1989 y no estaríamos donde estamos hoy”.En la final de la Copa de Alemania de ese año, Mill asistió en dos tantos, marcó un gol y evitó un tanto rival despejando sobre la línea, todo en un partido considerado una de sus actuaciones más completas. Norbert Dickel, compañero de Mill, recordó: “Vivimos muchísimo juntos, siempre mantuvimos una relación muy cercana y disfrutábamos hablando de los viejos tiempos. Estoy muy, muy triste. He perdido a un buen amigo”.Mill fue convocado en 17 ocasiones por la selección nacional y participó como integrante del plantel que conquistó la Copa del Mundo en Italia 1990 bajo las órdenes de Franz Beckenbauer, si bien no llegó a disputar minutos en el torneo. Dos años antes, fue parte del equipo que logró la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Seúl 1988.